BICHOS
Puro y sin memoria
Hay una fiera
mugrienta en tu cuerpo
Capitán de los arrabales
de la cocina
Rastreador de cubiles
En un adarme
trizas
lo invisible
Tu ojo y tu reojo
sigue a todo
lo que se mueve
por el suelo
Cuanto más veloz sea
más avivas
a gatas
para cazarlo
Tu lenguaje
lo aprenden antes
los bichos
que los sabios mayores
Al ácaro
lo encuentras riéndose
del suspiro
del arma de tu madre
Al escarabajo
errante
le subes a la almena
de tu castillo
para enseñarle
el paisaje
Y a falta
de enemigo
le encierras
en la mazmorra
con miga de pan
de almohada
y puesta la llave
Todo
hasta que el grito
de tu madre
aplasta contra la suela
de su zapatilla
a tu amigo de viajes
Ahí empieza
a enturbiarse la pureza
Ahí nace la memoria
Y hacina
la primera gota
de cobarde
©Rubén Lapuente
6 comentarios
cuspedepita -
Julio G. Alonso -
Salud.
Haidee -
Mejor no cobardes, sino inconscientes...
Me gusta la furia que se esconde en estos versos, el dolor traducido en coherencia... lo conozco bien, muy bien... y me liberé de esa primera gota de cobarde, perplepa en su concepción, vacío en su permanencia... aún así se puede volar y se debe volar...
Un abrazo
Joselu -
Zeltia -
la foto, estupenda.
virgi -
Besos