EL VIENTRE DE OLGA
¿No es todo un milagro?
Si hasta la voz se me endulza
Si hasta mi ciego abrazo se agranda
Yo citada en la sombra
¡Que ya se mueve!
¡Que se despereza!
Y qué suave aldaba llama
Qué terciopelo me roza
¿Un saquito lleno
de viento es la vida?
Y yo que era ayer casi nada:
El vaivén de una espiga
La hazaña de una nube
Esa chica de la tienda
anclada como una farola
La que vivía al bajar la persiana
¿No es un prodigio
que el tiempo me olvide?
¿Que este sol mío de adentro
no pueda esconderse?
¿Que este incansable
paseo de mis manos
por el bostezo de mi vientre
crezca y crezca?
¡Y cómo imaginarme que la alegría
me regalara lágrimas!
¡Eh! ¡Que ya se mueve!
©Rubén Lapuente
Foto: el vientre de Olga (con Alba o Marcos dentro)
12 comentarios
Rubén -
irene -
También te digo otra cosa, es una preocupación de por vida, mi "niño" tiene 36 añitos y no vivo pensando si se encuentra bien, si es feliz, si le pasa algo malo..., en fin, neuras mías.
Un abrazo, Rubén.
María -
Rodolfo Serrano -
virgi -
Un abrazo para ti.
Un beso delicado a la linda chica.
ricardo -
Un abrazo
Zeltia -
Yo que también tuve un vientre así, siento ahora esponjarse mi pecho, creo que hasta se me está poniendo redondito!
:-)
Teresa -
Un beso
Marís Socorro Luis -
Toda la suerte para Olga y besos.
carmen -
mucha -
Olga -