NIÑO EN SU CUARTO
Te duermes niño.
Te despiertas adolescente.
En su pequeño cuarto
mide el niño
su esfuerzo:
estira los dedos
de la mano
sobre el lomo
de los libros.
La geografía
ya tiene su sitio
en el desván
del cielo de sus ojos.
Al álgebra
como a un dragón
le blande su lanza
e intenta romper
su hechizo.
Vive inmerso
en la zozobra
de las palabras
de un pupitre
endemoniado:
"La vida es un viaje
hacia la muerte,
una larga enfermedad.
Piensa, piensa en ello"
Garabatea en su cuaderno.
Dibuja pensamientos.
Traza negras curvas
que se vengarán
de su tortuoso camino.
Al llamarle
para la cena,
de pronto, piensa
que su voz
será mañana
la que oye de su padre,
que, en este pequeño
cuarto, otro niño,
escuchará su voz
tras la pared.
Ensimismado,
una ráfaga de luz,
desdobla, traspasa
mágicamente
su reflejo
en el cristal
de la ventana.
-"¡Ya voy, ya voy!"
Sin oír sus pasos
al trasponer la puerta
del comedor
por primera vez
forzará la sonrisa.
Rubén Lapuente
2 comentarios
zeltia -
Un besos para ese3 niño tan maduro desde el futuro
patricio -