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El cuaderno de poemas de Rubén Lapuente

MOLINOS DE VIENTO

MOLINOS DE VIENTO

 

Por detrás de las hélices bajaba el sol lanzando sus andanadas de luz; a más viento, los élitros giraban más deprisa, cribando los hangares de hebras de lumbre en miríadas de escuadrones que ametrallaban los tejados, las ventanas, las paredes;…de  tanta centella de oro viejo que nos cegaba volvíamos las espaldas al crepúsculo;…y en la brisa de la noche como un inútil Quijote de rodela y lanza en ristre, masculla el hacha del leñador de aceñas de viento:  “toc, toc, toc , ese traqueteo  contra el gigante que se lleva el patio del recreo ,el paisaje de la vida, la futura memoria por gruesos cables como trochas; toc , toc,  toc, por la niñez del corazón golpeando en los fríos filamentos que candentes  sólo lucen olvido”                             

 ©Rubén Lapuente

 

Si aprendes a volver la cabeza. Si no te sangra la memoria. Si cuando el sol está por detrás de los molinos y todo tu pueblo, todo el valle, parpadea con ruido (efecto discoteca) y lo aguantas Si piensas que los extraterrestres están a punto de invadirnos, entonces,  pon un molino de viento en tu vida. ©Rubén Lapuente

7 comentarios

Zeltia -

solo pasaba por aquí y te dejo un
"feliz domingo"...

Teresa -

A virgi le tendrían que poner un parque de molinos donde los han puesto aquí bajo el monte El león dormido el paisaje que me llenaba todas las mañanas desde el coche cuando voy a trabajar. Qué razón tienes Rubén, ya no nos invadirán los extraterrestres, han salido corriendo.
Un beso

virgi -

Parecen bichos incansables.
Pero hay algo que me gusta de ellos, algo como hipnótico, no sé...
Besos

Javier -

Donde hay viento hay un comercial llamando a las puertas con un contrato suculento de por vida.Se compra la memoria.Tendremos más progreso, más luz,... más tristeza.
Saludos

ricardo -

A mí me hacen daño a la vista y donde los ponen no vuelve nadie, no saca fotos nadie de esos mamotretos que se cargan el paisaje.Sólo con dinero estan comprando voluntades,memorias, y nunca los veremos en la Moraleja.Que venga el leñador!

Zeltia -

Acostumbrada a ver los molinos como siluetas lejanas en la línea de horizonte, desde cualaquier carretera, quedé impresionadísima cuando estuve a los piés de uno:
tan grande e impresionante, tan ruidoso!
en un bosque de molinos, como el de la foto, sentiría tan grande claustrofobia, que no me permitirían respirar ni un par de trankimazines...

María Socorro Luis -

El progreso, como los extraterrestres, están ahí, al acecho, con su inevitable fealdad...

Hermoso texto poético.

Besos