JÓVENES SUEÑOS ROTOS

Me extrañó ver a Miguel  estos días sin su novia y me acerqué…

 

Tanto esfuerzo

Tanto tiempo entre libros

para que al subirte al final

a tu nuevo tren reluciente

se rompa su raíl

Y cómo me duele ese inmenso

joven cansancio suyo

Sé que su vida

comenzaría mañana

si sonara temprano un despertador

junto al mío

Que libre te quieres

Y eso sólo lo compra el trabajo

El llegar yo y verla tan hundida

El que me dijera sentirse una rémora

un lastre para mi

El que no le acariciara esta ciudad

 “moraduras tengo en los nudillos”

nos iba alejando

Hasta que se me ha ido

a respirar ese aroma

de estela de niña

El del nidal de su pueblo que siempre

es un bálsamo que sana

a ella seguro

Y nos hemos dado un tiempo

Bueno ella tiene que recuperarse primero

Aún está hundida

Yo sólo le mando mensajes de ánimo

 Que no se rinda  Que no está sola

Que la tristeza también puede dar rosas

Y yo tengo mucho aguante

                        ©Rubén Lapuente

4 comentarios

[Andrea - 17 de abril de 2013 - 21:49]

"Que la tristeza también puede dar rosas", que imagen tan bonita Ruben, me has sacado lagrimas acordándome de todos mis amigos que están en esa misma situación, en la que me incluyo también ahora. Esperemos que pronto los despertadores vuelvan a sonar temprano!! un abrazo!

[virgi - 01 de enero de 2013 - 21:43]

La paciencia del amante dará sus frutos. Todo tiene su tiempo y la vida lo sabe.
Mi deseo de un 2013 sereno y dulce.
Abrazos abrazos

[Isolda Wagner - 31 de diciembre de 2012 - 01:20]

Como son tan personales tus poemas, no puedo decir sino que estoy de acuerdo e como describes la situación de cada uno.Miguel tiene paciencia, buena base.
Que empecéis un año completamente nuevo y lleno de amor. Muchos besos.

[Laura Caro - 30 de diciembre de 2012 - 23:14]

Sí, la tristeza también puede dar rosas...

Es un poema precioso con cierta esperanza al final que deja sabor a cielo abierto y horizonte...

Vine a felicitarte el año.
Mis mejores deseos para ti y los tuyos en este año que entra; que no perdamos la esperanza.

Un abrazo enorme y agradecido.